Mi nombre es Wilmary Castillo, una mujer con sueños, metas y una gran pasión por crecer tanto en lo personal como en lo profesional. Desde siempre me ha interesado comprender la mente y el comportamiento humano, lo que me llevó a elegir la carrera de Psicología. Para mí, esta profesión no es solo un camino académico, sino también una vocación que me permitirá ayudar a los demás, escuchar, orientar y aportar un granito de esperanza en la vida de quienes lo necesiten.
Elegí la psicología porque creo firmemente en el poder de la empatía, en la importancia de la salud mental y en el impacto positivo que un profesional puede generar en la sociedad.
De cara al futuro, espero convertirme en una psicóloga comprometida, capaz de transformar vidas y contribuir al bienestar emocional de las personas. Sueño con seguir preparándome, alcanzar estabilidad y abrir caminos que me permitan no solo crecer profesionalmente, sino también darle un mejor futuro a mi hija y a mi familia.
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